Читать книгу Antología 10: Planes divinos онлайн | страница 36

- Declarar que el más allá es real, que hay un infierno y un lugar de reposo para los santos.

- Que traerá el libro de las memorias de todas nuestras obras buenas y malas cuando tengamos que comparecer ante su tribunal.

- Que solos llegamos a este mundo y así nos iremos, sin llevarnos nada.

- Que debemos luchar por vivir dedicados a la búsqueda de aquel que entregó su vida por nosotros.

- Que murió en la cruz para darnos lo más preciado, que es la vida eterna.

- Que Su palabra es viva y eficaz.

No tenía temor ni miedo cuando viví ese evento. Su palabra declara: “Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo”. El señor no me abandonó. Salmos 48:14 dice: “Porque este Dios es Dios nuestro eternamente y para siempre, Él nos guiará aún más allá de la muerte”. Esta es nuestra esperanza, a través de la fe, esperando la gloriosa venida de nuestro señor Jesucristo.

Dedicatoria y agradecimiento

Quiero dedicar este testimonio a mi esposa, Ingrid Salas. También a mis hijos Hernán, Franco y Bruno por estar siempre luchando junto a mí. A mi madre, Mariana Lagos, y mi hermano, Erwin Barrera, quienes ya no están físicamente con nosotros, pero que brillan en mi interior.

Al personal de salud del hospital Bouquet Roldan, especialmente a la fonoaudióloga Verónica Díaz y al kinesiólogo Juan Manuel Escudero por su dedicación y amor, dignificando su profesión. Al Dr. Emanuel (Paco) y a la Dra. Fabiana Leiva.

A mis pastores Marcos López y Dora Solís, y su congregación del ministerio profético “Aquí se alaba a Jehová” por sus incesantes oraciones a favor de mi vida.

A mis compañeros de fútbol del equipo de veteranos La Falda +55. A mis primos, familiares y amigos (no podría nombrarlos a todos) y a mi jefe Miguel Martínez, que en todo momento estuvieron asistiendo con su presencia a mi familia con oraciones o con un simple llamado.

Agradezco profundamente a la Editorial por permitirme compartir mis vivencias. Y para el lector, deseo invitarte a buscar a Dios. Jesús murió en la cruz por tus pecados y te regala la vida eterna. Hay un espacio vacío en tu interior que nada lo puede llenar, solo la presencia de Dios a través del Espíritu Santo. Bendiciones.