Читать книгу Salvos por gracia онлайн | страница 2

El pequeño libro arriba citado, dice en su prefacio: “Conviene ser celosos de la pureza doctrinal… el más grave peligro del error consiste en que tiene apariencia de verdad”… y en este punto, coincido plenamente con el autor.

La ley y la gracia”, son dos términos a los que podemos considerar excluyentes, o por el contrario, descubrir la maravillosa concordancia que los envuelve en el contexto bíblico.

Todos los pasajes bíblicos citados, son de la versión Reina Valera 1960, salvo indicación en contrario. Los resaltados o subrayados, en citas bíblicas y literarias, me pertenecen salvo indicación en contrario.

NOTA

¿Éxodo 20: 8

En sus primeras páginas hace una breve referencia a los orígenes del adventismo, no sin errores históricos y opiniones tendenciosas que fácilmente pueden refutarse pero que exceden el objetivo de esta obra.

El apóstol Pedro fue muy claro al decir: … hay algunas cosas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen para su propia perdición” (2° Pedro 3: 16). Por este motivo, es necesario estudiar en profundidad la Palabra de Dios, para vivir de acuerdo con la pura doctrina presentada en ella, y pedir a Dios, ser llenos del Espíritu Santo para aceptar su verdad en lugar de acomodarla a nuestra conveniencia.

Considero oportuno realizar esta pequeña obra para todos aquellos que con sinceridad buscan la verdad en la Palabra de Dios, pero que tal vez hayan sido influenciados por el libro en cuestión o algún otro libro con doctrinas similares.

El primer capítulo de “¿Por qué guardamos el domingo?”, se titula “La ley y la gracia”, título que doy también a mi primer capítulo.

Capítulo 1

LA LEY Y LA GRACIA

El diccionario define el término GRACIA como “Don de Dios, sin méritos ni proporción de nuestra parte, en orden al logro de la bienaventuranza”, y también “Beneficio o favor gratuitos”. Así, la gracia, viene a ser un regalo que Dios hace al hombre pecador que nada merece: “Porque la paga del pecado es muerte, más la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro” (Romanos 6:23), y todos pecamos: “Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús”(Romanos 3:23–24).


Представленный фрагмент книги размещен по согласованию с распространителем легального контента ООО "ЛитРес" (не более 15% исходного текста). Если вы считаете, что размещение материала нарушает ваши или чьи-либо права, то сообщите нам об этом.